Este proyecto, que permite disfrutar de unas letras de Soria de casi dos metros de altura de madera en el Alto del parque, es el fruto de la participación ciudadana haciendo realidad una propuesta vecinal enviada a través de los Presupuestos Participativos. El diseño ha sido realizado por Alfonso Pérez Plaza y se ha ejecutado por la empresa Madera PinoSoria.
Esta iniciativa evidencia el ciclo sostenible del Bosque Modelo de Urbión con madera comprada en una subasta del Ayuntamiento de un lote de Santa Inés, un trabajo realizado en los montes y aserraderos sorianos, el certificado forestal PEFC de calidad, un tratamiento totalmente ecológico y un retorno a la ‘vida’ de nuestros pinos en La Dehesa, corazón verde de la ciudad.
El Alto de La Dehesa luce desde hoy unas letras de Soria de casi dos metros de altura elaboradoras con madera de pino de Soria y que se deben convertir en un símbolo del ciclo sostenible de los recursos naturales de la capital dentro de su objetivo de seguir implantando los 17 ODS de la Agenda 2030. De esta forma, este proyecto, que ya es una realidad, aúna importantes objetivos de desarrollo sostenible comenzando con la participación al tratarse de una iniciativa presentada en el Ayuntamiento por los ciudadanos de la mano de los Presupuestos Participativos que cada año se convocan. Simultáneamente, también cumple con la sostenibilidad económica y medioambiental al tratarse de un ciclo con principio y final en el propio ayuntamiento. De esta forma, las letras se han elaborado con podas de madera de un lote de Santa Inés, dentro del Bosque Modelo de Urbión, y subastado por el propio Consistorio de la capital como co-propietario de los aprovechamientos forestales junto a la Mancomunidad.
La empresa soriana Madera PinoSoria ha sido la encargada de elaborar las mismas con la madera adquirida en la citada subasta y utilizando la misma para la elaboración de los carácteres. El diseño ha sido realizado por Alfonso Pérez Plaza y permite disponer de una imagen de la ciudad que une ese deseo de aprovechar los recursos endógenos y paralelamente ser un reclamo turístico más en la ciudad y un motivo de orgullo para una ciudadanía muy identificada con sus recursos naturales.
Las letras se han trabajado además en un aserradero local con una trazabilidad totalmente controlada que certifica la procedencia de la madera con el sello PEFC que asegura y valida que los bosques son gestionados de forma responsable, y que su multitud de funciones están protegidas para generaciones presentes y futuras. Para ello cuenta con la colaboración de propietarios y empresas del sector forestal, que apostando por la certificación de sus bosques e industrias, están asegurando la sostenibilidad del sector. PEFC proporciona el marco para la aplicación de unas normas comunes acordadas internacionalmente, a todos sus sistemas de certificación nacional, y a los gestores forestales y empresas de transformación de productos forestales. En el caso de esta madera que hoy se puede ver en La Dehesa, la empresa Madera PinoSoria ya la ha utilizado en actuaciones como el Pilar de Zaragoza, el Teatro Zorrilla o en el Castillo de Yanguas evidenciando la calidad sobresaliente de este recurso de nuestros montes.
Las letras se han ubicado en La Dehesa con el objetivo de hacer retornables los recursos y tendrán una ‘vida’ dentro de que es el corazón verde de la ciudad con una evolución que irá marcando la propia madera que ha sido sometida a tratamientos ecológicos para conseguir una mayor durabilidad en el exterior de las mismas. La concejala Ana Alegre sí ha querido pedir que “todos entendamos estas letras como un símbolo de cómo utilizar nuestros recursos y de cómo algunos de ellos pueden ser sostenibles medioambiental y económicamente con lo que supone de retorno en empleo, cuidado de montes, fijación económica, social… Por ello, también es importante que ahora todos nos sumemos también al cuidado de estas letras para su mejor mantenimiento y permanencia en un parque tan emblemático como es el de la Dehesa”.
